Además, otros factores son responsables de este aumento. De acuerdo a los expertos, “el incremento de la prevalencia de la enfermedad de Parkinson también está impulsado por cambios en estilos de vida, factores ambientales y avance socioeconómico producto de la industriali
zación y urbanización”, como se ha demostrado en distintos estudios epidemiológicos.
En tanto, al referirse al estilo de vida, indicaron que la inactividad física, el consumo de alimentos procesados y el aumento de enfermedades metabólicas como la diabetes tipo 2 están asociados con un mayor riesgo de desarrollar Parkinson. “Si la actividad física aumenta un 20 %, la cantidad de casos proyectados para 2050 podría reducirse un 2,6 %”, aseguraron en el trabajo.
“Las proyecciones podrían guiar en la planificación de medidas de control y destacar la necesidad urgente de acciones para abordar las demandas crecientes de atención médica”, explicaron en el documento.
Al tiempo que resaltaron que los “países con bajo Índice de socio-desarrollo enfrentarán la mayor carga de casos de Parkinson debido al envejecimiento latente y un crecimiento poblacional significativo”.
“Ambas, la prevalencia por edad y la prevalencia estándar por edad, experimentarán un aumento significativo en los países de Índice de socio-desarrollo medio, mientras que las regiones de Índice alto verán un crecimiento más contenido”, destacaron los científicos.
Y agregaron: “La heterogeneidad en las tendencias proyectadas de la prevalencia de la enfermedad de Parkinson según grupos de edad, sexos y ubicaciones geográficas subraya la necesidad de estrategias de prevención adaptadas”.
Desafíos y estrategias para enfrentar el futuroEl estudio de BMJ también destaca las desigualdades en la carga de la enfermedad entre diferentes regiones y grupos socioeconómicos. Los países con índices socioeconómicos medios serán los más afectados, con un aumento del 144 % en la prevalencia general y del 91 % en la prevalencia ajustada por edad entre 2021 y 2050. Esto se debe, en parte, al rápido envejecimiento de la población y a los cambios en los factores de riesgo asociados con el desarrollo económico y la urbanización.
En contraste, los países con índices socioeconómicos bajos enfrentarán un aumento significativo en el número total de casos. Sin embargo, estas regiones también enfrentan desafíos únicos, como la falta de acceso a servicios de salud especializados y medicamentos esenciales. El informe también subraya la necesidad de desarrollar tratamientos innovadores y efectivos.
Aunque actualmente no existe una cura para el Parkinson, los avances en terapias génicas y de reemplazo celular ofrecen esperanzas para el futuro. Además, se requiere una mayor inversión en investigación para comprender mejor los factores de riesgo y desarrollar estrategias de prevención más efectivas. ”Las iniciativas que fomenten el cambio de conducta y aumenten la actividad física durante toda la vida ofrecen perspectivas prometedoras para reducir la prevalencia mundial de Parkinson”, indicaron los expertos. Y concluyeron: “El enfoque sobre el desarrollo de terapias innovadoras y medicamentos que modifiquen el curso de la enfermedad es crucial para afrontar el aumento global de la prevalencia de Parkinson”
PorRomina Cansler INFOBAE